Durante los meses de verano, los puntos de acceso marítimo como España son testigos de un aumento de las actividades marítimas. A medida que la llamada del mar se intensifica, los yates y otras embarcaciones de recreo atraviesan la extensión azul, marcando el comienzo de una vibrante temporada de navegación. En consecuencia, la demanda de seguros marítimos también alcanza su punto máximo durante estos meses.
Una parte integral de este fenómeno estacional es el papel de un perito de cascos, un comisario de averías en su versión más técnica naval. El aumento de la actividad marítima subraya la importancia de su papel. Sus meticulosas evaluaciones forman la columna vertebral de cualquier proceso sólido de seguros marítimos. Desempeña un papel crucial en la gestión de los sucesos más comunes que conducen a reclamaciones de seguros marítimos, que incluyen el robo de embarcaciones, el robo de equipos, la colisión con objetos submarinos, el hundimiento, los incendios, las explosiones y el encallamiento, entre otros tipos de incidencias.
«Un perito de cascos cualificado es el mejor aliado para garantizar que su embarcación de recreo esté en condiciones de navegar, sea segura y esté debidamente valorada»
En COMISMAR, aprovechamos nuestra experiencia de más de 80 años en el sector para la realización de verificaciones y peritaciones que dilucidan los cuatro tipos clave de inspecciones de embarcaciones de recreo más buscados durante el verano:
1. Inspecciones previas a la compra: esta inspección exhaustiva es esencial a la hora de comprar una embarcación de recreo usada. Una inspección previa a la compra evalúa el estado y la seguridad de la embarcación, proporcionando información valiosa que puede influir en las decisiones de compra, la negociación y la suscripción del seguro.
2. Inspecciones de condición y valor (C&V): a menudo solicitadas por compañías de seguros o prestamistas, las encuestas C&V determinan el valor de mercado actual de la embarcación y su condición general. Estas evaluaciones ayudan a las aseguradoras a calcular las primas y decidir los términos de la cobertura.
3. Inspecciones de daños: después de que una embarcación haya sufrido daños, se requiere al perito de cascos para que inspeccione el alcance de los daños, calcule los costos de reparación y determine la causa del incidente. Estos hallazgos ayudan en el proceso de reclamos, asegurando una compensación justa basada en los términos de la póliza.
4. Inspecciones de motores: una inspección de motores se centra en el sistema de propulsión de la embarcación, desde el rendimiento del motor y los sistemas de combustible hasta los controles y el escape. Si bien no siempre es requerido por las aseguradoras, este tipo de inspección proporciona información valiosa sobre un componente significativo y costoso de la embarcación.
Un perito de cascos cualificado es el mejor aliado para garantizar que su embarcación de recreo esté en condiciones de navegar, sea segura y esté debidamente valorada. Al comprender qué esperar durante estas inspecciones, se puede garantizar una singladura más tranquila en los mares de seguros marítimos.
En COMISMAR encontrará a nuestros especialistas listos para cualquier tarea. Incluida la peritación por video, cuando las circunstancias lo permiten. Este verano, déjanos acompañarte en la seguridad de tu embarcación.